Hace mucho tiempo, en un coche rojo que corría por los lares más bonitos y tranquilos del norte, me enseñaste a cantar libertad, y a pensar políticamente correcto.
Era muy pequeño, y yo sólo quería jugar a disparar a los coches que venían detrás, pero de repente un "el ejército del Ebro, una noche el río pasó.." nos espabilaba y rápidamente uníamos nuestras voces.
Tú nunca tuviste radio en tu coche, y eso era acojonante.
Ahora mismo, me recuerdas a Silvio.
comandante, enséñanos a ser idealistas...
ResponderEliminarsaludo :)